La visión depende de que todo el ojo funcione correctamente, así, es importante que tanto la parte transparente del ojo llamada córnea, como el cristalino, es que el que se hace opaco cuando tenemos una catarata, como la retina, que es la que recibe las imágenes y se las manda al cerebro para que las interprete, estén en buenas condiciones para una visión adecuada.
Para que el ojo en su totalidad funcione, necesita que le llegue sangre como a cualquier otro órgano del cuerpo, así, si hay algún punto al que deja de llegar, tendremos fenómenos parecidos a los infartos en el corazón o ictus en el cerebro pero que afectan al ojo.
En la retina las obstrucciones que provocan que la sangre deje de fluir adecuadamente pueden ser venosas o arteriales, y en este caso vamos a hablar de las venosas.