Cuando un ojo ciego es doloroso, puede realizarse una enucleación o evisceración para conseguir un lecho apropiado en el que colocar una prótesis confortable que imite la forma y el color de ojo contralateral.
Cuando un ojo ciego es doloroso, puede realizarse una enucleación o evisceración para conseguir un lecho apropiado en el que colocar una prótesis confortable que imite la forma y el color de ojo contralateral.